* Pasan lista a líderes indígenas asesinados por la 4T
* Les habita la rabia por el daño a la Madre Tierra
De la Mesa de Redacción Rafael Castilleja
De Arcano Político
Pronunciamiento conjunto de la Cuarta Asamblea Nacional del
CNI-CIG y EZLN.
Al pueblo de México
A los pueblos del Mundo
A la Sexta Nacional e Internacional
A las Redes de Resistencia y Rebeldía
A los medios de comunicación
Hermanos, hermanas
Desde el Caracol Zapatista Jacinto Canek, en el CIDECI-
UNITIERRA, en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, los días 18 y 19 de
diciembre de 2019, para celebrar la 4ª Asamblea Nacional del Congreso Nacional
Indígena y el Concejo Indígena de Gobierno los pueblos Afromexicano, Binizaa,
Chinanteco, Chol, Chontal, Comca’ac, Hñahñu, Kumiai, Mam, Maya, Mayo, Mazahua,
Me´phaa, Mixe, Mixteco, Nahua, Náyeri, Purépecha, Quiché, Rarámuri, Téenek,
Tepehuano, Tohono Oódam, Tojolabal, Totonaca, Tzeltal, Tzotzil, Wixárika,
Yaqui, Zoque, Chixil, Cañari y Castellano, provenientes de 24 estados de la
república, así como invitados de Guatemala, Ecuador, El Salvador y Estados
Unidos, nos encontramos para escucharnos, para ver en el compañero y compañera
que en colectivo somos pueblos, naciones y tribus.
Nos encontramos para ver y entender la guerra neoliberal que
de arriba viene cubierta de mentiras simulando gobernar, cuando ponen el país
en manos del gran capital, al que le estorba la conciencia colectiva de los
pueblos y echa a andar su maquinaria de despojo:
A través de la violencia sanguinaria y terrorista en contra
de los pueblos que defienden la tierra.
El luto y la rabia que nos habita a quienes hoy nos
encontramos, es por el daño a la madre tierra, el despojo de todas las formas
de vida. Y aquellos que decidieron destruirla para convertirla en dinero tienen
nombre y apellido, así como los asesinos de nuestros compañeros. Nos duele en
el corazón colectivo el asesinato del compañero delegado popoluca del CNI,
Josué Bernardo Marcial Campo, también conocido como TíoBad quien por su arte,
su música y su protesta en contra de los megaproyectos que el mal gobierno
pregona haber terminado como es el fracking, fue desaparecido y encontrado
brutalmente asesinado el pasado lunes 16 de diciembre.
El compañero Samir Flores Soberanes del pueblo nahua de
Amilcingo, Morelos
El compañero Julián Cortés Flores, del pueblo mephaa de la
Casa de Justicia de San Luis Acatlán, Guerrero.
El compañero Ignacio Pérez Girón, del pueblo tzotzil del
municipio de Aldama, Chiapas.
Los compañeros José Lucio Bartolo Faustino, Modesto Verales
Sebastián, Bartolo Hilario Morales, e Isaías Xanteco Ahuejote del pueblo nahua
organizado con el Concejo Indígena y Popular de Guerrero – Emiliano Zapata
(CIPOG – EZ).
Los compañeros Juan Monroy y José Luis Rosales, del pueblo
nahua de Ayotitlán, Jalisco.
El compañero Feliciano Corona Cirino, compañero del pueblo
nahua de Santa María Ostula, Michoacán.
Nuestros compañeros fueron asesinados por oponerse a la
guerra con la que el mal gobierno pretende hacerse de nuestras tierras, montes
y aguas, para consolidar el despojo que amenaza nuestra existencia como pueblos
originarios.
Consultas mentirosas
El mal gobierno federal simula consultar a los pueblos,
suplanta nuestra voluntad colectiva ignorando y ofendiendo nuestras formas de
organización y toma de decisiones, como es el vulgar engaño a lo que llamó
“Consulta”, cuyo objetivo no es otro que imponer por la fuerza el mal llamado
Tren Maya, que entrega los territorios indígenas al gran capital industrial y
turístico, o las mentiras a la que llaman también consulta para imponer con
violencia el Proyecto Integral Morelos o los megaproyectos de muerte que reconfiguran
nuestro país para dejarlo a disposición del capital multinacional,
principalmente imponiendo el poderío terrorista de los Estados Unidos.
Polarización y enfrentamiento entre los pueblos
Para avanzar en su guerra, el mal gobierno apuesta por el desmantelamiento
de los tejidos comunitarios, a fomentar los conflictos internos que tiñen de
violencia a las comunidades entre quienes defienden la vida y quienes
decidieron ponerle precio, aun a costa de vender las futuras generaciones para
el beneficio millonario de unos cuantos corruptos, a los que sirven los grupos
armados de la delincuencia organizada.
Por lo anterior, señalamos que resistimos y luchamos porque
estamos vivos, porque, aunque tenemos miedo de dejar de existir como lo que
somos, no es esa la vía que elegimos para nosotros, nosotras y para quienes nos
debemos.
Expansión de la guerra
Mientras nosotros, como pueblos originarios, sufrimos con
más violencia que nunca la guerra del capital, el mal gobierno junto con sus
grupos armados militares, policiales, paramilitares, guardias blancas y grupos
de choque extienden en nombre del dinero la destrucción sobre todo el
territorio nacional.
En Veracruz:
En la región del Totonacapan y hasta la Huasteca, se
instalan los gasoductos Texas-Tuxpan, Tuxpan-Atotonilco y Tuxpan-Tula, a la par
de las mentiras del gobierno Neoliberal de AMLO, se apuntala y se opera la
fractura hidráulica para extraer hidrocarburos, se hacen trasvases para
llevarse el agua de los ríos y ponerlo en manos de privados, amenazando la vida
de los pueblos tének, nahuatl, totonaco, otomí y tepehua, además del aumento en
los grupos de la delincuencia organizada.
En Michoacán:
En el territorio de la meseta purépecha se extiende la
siembra masiva de aguacate, despojando el territorio de las comunidades
indígenas, se derriban los bosques y están matando los lagos de Cuitzeo,
Zirahuen y Pátzcuaro.
En la sierra costa del pueblo nahua, la intención de saqueo
por bandas de la delincuencia organizada con el descarado apoyo de todos los
niveles del mal gobierno, amenazan la vida y la integridad de los pueblos
originarios, particularmente de nuestros hermanos de la comunidad indígena
nahua de Santa María Ostula, que resisten la devastación de los territorios
comunales, mediante la explotación de minerales, de maderas preciosas y la
explotación turística de las playas en los municipios de Aquila, Coahuayana,
Chinicuila y Coalcomán, queriendo hacer parecer que la guerra es entre
comunidades o entre comuneros, mientras que desde arriba los poderosos esperan
el momento de poder apropiarse de la vida que Ostula defiende.
En la comunidad purépecha de Zirahuén, que tiene una larga
lucha de defensa del lago del mismo nombre, hoy con la ayuda de grupos armados
de la delincuencia organizada, los empresarios aguacateros destruyen el bosque
y contaminan el agua con el uso de agrotóxicos.
En Jalisco:
Persiste la invasión del territorio wixárika de San
Sebastián Teponahuaxtlán a manos de supuestos pequeños propietarios de
Huajimic, Nayarit. Así mismo el gobierno pone en manos de empresas mineras
extranjeras miles de hectáreas del territorio sagrado Wirikuta, en el estado de
San Luis Potosí, amenazando la existencia cultural y del territorio ceremonial.
En la comunidad indígena chichimeca de San Juan Bautista de
La Laguna, en el municipio de Lagos de Moreno, el mal gobierno pone en manos de
particulares el territorio ancestral reconocido en sus títulos primordiales,
imponiendo además un gasoducto para abastecer a grandes industrias, ante las
que, de forma organizada, la comunidad ha resistido a pesar de la represión y
criminalización que los malos gobiernos estatales y municipales ejercen en su
contra.
La comunidad tepehuana y wixárika de San Lorenzo de
Azqueltán sufre a la par del despojo de su tierra, de amenazas de muerte e
intentos de homicidios como el ocurrido el pasado 3 de noviembre, en que el cacique
llamado Fabio Flores alias “La Polla”, junto con personas armadas atacó a las
autoridades comunales ocasionándoles graves heridas que estuvieron a punto de
costar la vida a los comuneros Ricardo de la Cruz González, Rafael Reyes
Márquez y Noé Aguilar Rojas. Todo esto con la complicidad del gobierno
municipal de Villa Guerrero, Jalisco, prevaleciendo la impunidad en este
cobarde crimen.
En Puebla:
El mal gobierno junto con su grupo armado de la Guardia
Nacional y grupos policiales, pretenden imponer un megaproyecto que vertería
desechos tóxicos al río Metlapanapa, esto como parte del llamado Proyecto
Integral para la Construcción del Sistema de Alcantarillado Sanitario de la
Zona Industrial de Huejotzingo, conocido como “Ciudad Textil”. En la defensa de
la vida del río y de los pueblos que lo habitan, nuestos compañeros y
compañeras del pueblo nahua, de las comunidades de San Mateo Cuanalá, San Lucas
Nextetelco, San Gabriel Ometoxtla, Santa María Zacatepec y la colonia José
Ángeles han sufrido agresiones por los esos cuerpos represivos.
En la Sierra Negra de
Puebla, fue desaparecido nuestro compañero Sergio Rivera Hernández desde el
pasado 23 de agosto de 2018, en represalia a su lucha en contra de la
destrucción que causa la empresa minera Autlán, por lo que seguimos exigiendo
su presentación con vida.
En Campeche: con el
pretexto del mal llamado “Tren Maya” se está proyectando la construcción de 50
nuevos centros urbanos, que no solo conllevan destrucción ambiental, sino que
implica el despojo de territorios de pueblos originarios.
En Morelos, Puebla y Tlaxcala:
Por la fuerza se impone el llamado Proyecto Integral Morelos
reprimiendo a quienes no están de acuerdo, como es el asesinato de nuestro
hermano Samir Flores. Esye crimen continúa impune, pues mientras abajo Samir es
un ejemplo de dignidad, para los de arriba solo les merece desprecio, pues para
ellos lo importante es construir la termoeléctrica de Huexca, Morelos, el
gasoducto en las faldas del volcán sagrado Popocatepetl, así como la infraestructura
industrial y de comunicaciones que conlleva. Escenario en el que se agudiza la
presencia de violentos grupos delictivos.
En Chiapas:
Persiste la intención de despojo y privatización del
territorio Tzeltal en beneficio de empresas privadas, mediante la llamada
“Carretera Cultural” que anteriormente se llamaba “Super Carretera” y que
pretende pasar por el territorio del ejido de San Sebastián Bachajón, Palenque
y otras comunidades.
Así mismo en el territorio Zoque, el gran capital identificó
un corredor petrolero que abarca 9 municipios, en una superficie de 84,500
hectáreas y que pretende atravesar el territorio de la comunidad de
Chapultenango.
Los malos gobiernos de todos los niveles, buscan mediante
campañas de confrontación, paramilitarización y suplantación, acabar con la
organización de las comunidades que se organizan de forma autónoma, como es el
caso de nuestros hermanos del ejido Tila.
En la costa de Chiapas hemos recibido amenazas y despojo de
nuestras tierras por el intento de la construcción de la carretera Pijijiapan –
San Cristóbal de las Casas-Palenque. Además de la construcción de un gasoducto
que pretende atravesar la zona costa de Chiapas y Guatemala.
Persiste el hostigamiento militar y paramilitar en contra de
los territorios zapatistas, para tratar de debilitar y destruir no solo los
espacios autónomos que se han construido, sino del eco que se expande por el
país y por el mundo.
En la Ciudad de México:
Mientras se niegan los espacios públicos a los pueblos
originarios residentes en la ciudad para la realización de su trabajo, estos
son entregados a los capitales privados para su enriquecimiento. Tal es el caso
del pueblo Otomí residente en la Ciudad de México que actualmente se encuentran
en amenaza de desalojo en la calle Roma número 18 en la colonia Juárez.
Mientras se agudiza el despojo de los espacios campesinos e
indígenas en la ciudad de México, también el hostigamiento en contra de los
compañeros Gerardo Camacho y Jaime Gómez quienes han recibido amenazas de
muerte del comisariado ejidal de la comunidad de San Nicolás Totolapan.
En Guerrero:
Persiste el hostigamiento en contra de nuestros hermanos del
Consejo Indígena y Popular de Guerrero Emiliano Zapata, que construyen sus
formas de seguridad y justicia cuidando el territorio ante la ambición
capitalistas.
Estado de México:
En la cuenca del Valle de México el megaproyecto neoliberal
de Santa Lucía y la imposición de la carretera Tuxpan-México se ha realizado a
través de paramilitares en la carreta en el tramo Ecatepec- Peñón. Así como el
entubamiento y privatización de ríos y manantiales.
En Oaxaca:
El territorio chinanteco de San Antonio de Las Palmas está
siendo amenazado por concesiones mineras que abarcan más de 15mil hectáreas,
así como proyectos de represas sobre el río Cajonos, en la cuenca del
Papaloapan.
En Oaxaca y Veracruz:
En el sur de Veracruz, parte norte del Itsmo de Tehuantepec
pretenden imponer un corredor interoceánico, que transformaría la región en un
inmenso parque industrial, dejándonos sin agua, destruyendo la naturaleza y el
tejido de los pueblos con violencia e inseguridad. Valiéndose de los ríos de
los territorios indígenas para la ampliación de los puertos que conectarían el
corredor interoceánico, que está acompañado de los megaproyectos mineros, de
fracking, de los parques eólicos empresariales y del despojo del agua que nace
en territorios indígenas.
Sonora:
El Río Mayo está siendo contaminado por la minera a cielo
abierto Cobre del Mayo que vierte sus desechos tóxicos a la presa Abelardo L.
Rodríguez, conocida como presa del Mocuzarit, amenazando la vida colectiva del
pueblo Mayo.
Nayarit:
El río San Pedro en el territorio Nayeri, se encuentra
amenazado por el proyecto hidroeléctrico “Las Cruces”, así como la megaminería
de oro y plata en la comunidad de Jazmín del Coquito, en la ranchería Los
Arroyos.
Yucatán:
En el contexto de la imposición en curso del mal llamado
Tren Maya, fue amenazado de muerte nuestro compañero Pedro Uc Be, de la
Asamblea en Defensa del Territorio Maya Muuch Xiinbal
Por todo lo anterior señalamos que nuestros pueblos,
naciones y tribus seguiremos cuidando y defendiendo las semillas de resistencia
y rebeldía en medio de la muerte.
Construyendo un camino que perdure en medio de la oscuridad; y nosotros,
nosotras, ahí estaremos para sanar a nuestra madre tierra, junto con los pueblos
del mundo.
Diciembre de 2019
Por la Reconstitución Integral de Nuestros Pueblos
Nunca Mas Un México Sin Nosotros
Congreso Nacional Indígena
Concejo Indígena de Gobierno
Ejército Zapatista de Liberación NacionalAl pueblo de México