Arcano literario
Mario Luis Altuzar Suárez
… y en medio de nosotros/ mi madre como un Dios!”, escribió a
su musa Rosario de la Peña, en la séptima estrofa de su Nocturno a Rosario, el
6 de diciembre de 1873 el poeta saltillense Manuel Acuña, antes de quitarse la
vida con cianuro a los 24 años, en su habitación de la Facultad de Medicina de
la Real y Pontificia Universidad de México.
-“¡Qué miedo! ¿Te imaginas? En la noche de bodas con la
madre ¡en medio de los dos!”, expresa la periodista treintañera al interrumpir
su lectura de la imagen poética edípica, para muchos críticos distanciados con
más de un siglo en sus hábitos y costumbres, y otros en que consideran una
leyenda el enamoramiento porque el poeta sostenía relaciones con la mexiquense Laura
Méndez de Cuenca, antes de que ella, alcanzara la fama intelectual.
Rechazo la percepción de mi colega, por considerarla
superficial y ajustada a la visión doctrinaria machismo feminista para
victimizarse al criminalizar al hombre al señalar:
-“Seguramente responde a los usos y costumbres de la época,
que en menor o mayor medida se globaliza en el comportamiento social. Aunque a
veces se intenta olvidar o manipular perversamente, los registros históricos emergen
tarde o temprano, según se vea. Y en este caso, se visibiliza la doctrina de las
“madres victorianas” en los ochocientos con los balbuceos del daguerrotipo en
1839”:
-No entiendo…
-“Tres niños: Uno como de seis años al lado izquierdo, al
centro está sentado una bebé de meses y del lado derecho una niña de unos diez
años, bien vestidos y…”
-“¿Fíjate bien?
Ante su silencio le señalo la tela en que se encuentra
sentada la bebe al expresar: “¡Allí está la mamá fantasma! Sostiene la niña y
los otros están como enojados porque deben estar como estatuas, ¡sin moverse!”.
El reportaje refiere sobre la Revolución Industrial datada
en 1760 en la próspera Inglaterra con sus grandes avances tecnológicos y
económicos, conducido con la mano férrea del extenso reinado de Victoria entre
el 20 de junio de 1837 y el 22 de enero de 1901. Época bautizada como la “Era
Victoriana” que por allá de 1800, para quitar obstáculos al desrrollo, inicia
la atención de un sector vulnerable: La Mujer, especialmente las madres
solteras o con hijos concebidos fuera del matrimonio, las viudas y las
trabajadoras que no podían hacerse cargo personalmente de sus bebés. ¡Nacen las
Granjas de Niños!
Las mujeres que trabajan como “granjeras” observan la
posibilidad de mayores ingresos con más niños a su cuidado y se registran malos
tratos, abusos y hambre en los infantes que lejos de una imagen edípica crean
la imagen del enemigo torturador. Un crecimiento económico y social con el alto
costo en el sacrificio de la salud mental de los infantes.
-“Lo peor, es una realidad que trascendió las fronteras
británicas y la madre es la custodia del presente y del futuro social, que se
replica directamente en los setenta y la desatención y descuido nos lleva a la
hipócrita legaloide de la Generación de Cristal, en donde hay más leyes
protectoras de mujeres que parece favorecer el crecimiento geométrico del feminicidio,
el aumento de categorías de preferencias sexuales, de dos a cuatro y ahora m{as
de diez, de cuidar los derechos de los niños en familia mientras desparecen en
las calles para la impune industria del tráfico de órganos, prostitución, pornografía,
mercadeo de drogas e incluso, de usarlos como mercenarios y… ¡el rosario de la
depravación social es tan largo!
-“En lo que dices veo la causa de la confrontación social
que nos entretenga mientras ellos, hombres y mujeres del poder, roban y saquean
con la persecución de enemigos y adversarios, sin que nadie diga nada por su
costumbre a la normalidad cotidiana de la violencia”.
Pedimos la cuenta y nos despedidos para ir a nuestras
respectivas redacciones cotidianas.
Tuxtla
Gutiérrez, Chiapas, México, 12 de enero de 2320
Genial, simplemente espectacular, una narrativa impresionante, Mario Luis Altúzar Suárez, siempre en defensa por un México mejor !!!
ResponderEliminarFELICIDADES 🥰🍀