jueves, 16 de mayo de 2024

Predestinados ©, Cuento

Arcano literario


Mario Luis Altuzar Suárez
Arcano Radio

… no fue casualidad que este viernes precisamente el reloj estuviera 20 minutos atrasado, ¿Quién lo cambió? ¿Y por qué? Preguntas que intentan descifrar la causalidad si se complementan con el resto de interrogantes: ¿Qué?, ¿cómo?, ¿cuándo?, ¿dónde?, que además de ser la técnica para redactar el primer párrafo de una noticia en treinta y cinco palabras, se convierte en una filosofía de vida al procesar la percepción del entorno, y cumplirse la sentencia bíblica de “ojos para ver lo que otros no ven, oídos para oír lo que otros no oyen”.

Y con el vicio profesional, desglosamos los hechos: El reloj de pared está atrasado veinte minutos. Mmmmmm. ¡No es mucho tiempo! Aunque la tolerancia para los empleados y trabajadores es de quince minutos, y sumarle cinco, a quien llegue retrasado se le acumula una ausencia o falta. Es difícil pensar que se trate de una broma, más bien de una conspiración. Cómo se manda en el periodismo: Piensa mal y acertarás.

Convergen dos interrogantes, el ¿qué? O el retraso, con el ¿quién? Es cuestión de analizar las relaciones personales para poder establecerlo, o sea, el ¿cuándo inició la discordia entre dos o más personas? Obvio que tampoco puede descontarse una razón sentimental o incluso de envidia, la enfermedad social del Tercer Milenio. Una interrogante que nos lleva a la causa o el ¿por qué?, de este momento que es el ¿cuándo?

¡Oh! Increíble. ¡Jajajaja! La respuesta no está en el viento… ¡la tengo aquí, en mi nariz! Y lo mejor, con base en la conseja del abuelo: Ver la paja en el ojo ajeno, y no en la viga del propio. Y sí, ¡es una viguetota! Por allí debía empezar. Pero bueno. ¡A corregirlo! Ahí viene, tan linda como siempre: Grácil y frágil figura con vestido entallado a la mitad de los muslos que distraen en la percepción de esa cabellera negra a los hombros. ¡Todo un conjunto en armonía con el sisear del aire, ¡el mismo que me falta!

Me mira con una sonrisa y muestra la tarjeta de entrada. “¿Sabes lo que esto significa? Estás castigado tres días”.

¡Oh, la, la! Me la hizo, aunque, es inaplicable. Los reporteros marcamos tarjeta al llegar sin que exista una hora precisa de entrada. El Jefe de Información la llama y le explica que nuestro ejercicio profesional es elástico en el tiempo. Ella refunfuña algo ininteligible. Mi turno: “¿Qué sucede entre ustedes?”, y rompe el prolongado silencio: “Creo que es tiempo de que los dos vayan a tomarse un café. ¡Si no lo hacen, los corro a los dos!”.

Y aquí, al momento en que recordamos ese momento, degustando el aromático cultivado en las zonas montañosas de Chiapas, escuchamos que “veinte años no son nada”, en el maravilloso tango “Volver”, creado en 1934 por el músico Carlos Gardel y el poeta Alfredo Le Pera. Pero veinte minutos si cambiaron dos vidas… y contando, cantando que la vida es un tango en los predestinados.

Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, México, 16 de mayo del 2024.

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