Arcano Político
Mario Luis Altuzar SuárezArcano Radio
Deseamos un feliz inicio de Pascua
a nuestros hermanos judíos.
Bueno, menos a una, a la que se
niega como judía, se asume como atea, dice sentirse mexicana, luce a la
Guadalupana bordada en la parte baja de la falda para restarle importancia, y
¡visitar al Papa!, para que bendiga una rosa para el hambriento pueblo de
México-
Mientras ella, acumula los
dineros millonarios ocultos en los Panama Papers, herencia de su abuelita… ¡qué
forma de decirnos que sí, si tiene abuela!, aunque resguardó informaxión, desde
el Segundo Piso en Ciudad de México a los fondos de mantenimiento de la Línea
12 del metro que dejó 26 muertos, sospechosa autorización en construcciones,
como el Rébsamen, destrucción de templos católicos y… ¡ufff! Rosario tan
grande.
Aunque causó ternurita cuando
preguntó a chiapanecos, ¿qué les falta? Y escuchar un coro fueteovejuniano que
falta todo. Insistió: ¿Cómo están los Centros de Salud? Y con miradas incrédulas,
los acarreados morenos, se preguntan entre ellos: ¿Cuáles?
Con la resignada mirada de sumisión
milenaria, unos indígenas choles denuncian la usurpación de las candidaturas indígenas,
con aval del candidato a gobernador. Y, pues, no se pueden arriesgar cuatro
millones de votos prometidos por el íntimo del cacique “meco”, por atender a
unos residentes de la explotación, la burla y el engaño. ¡Y los ignoró!
Allí estaba él, ¡sí!, el de la
Nueva Era con los mismos de la vieja Era, como en ese 1824 cuando dos municipios
(departamentos), usurparon la voluntad de los otros 10, dice que están felices,
¡chiapanecos felices a su lado y de la que se dice atea!
¿Acaso importa que los
chiapanecos rechacen al tabasqueño Pepe Cruz, el secretario de Salud que disminuyó
a la mitad la planta laboral, dejo sin medicamentos y mantenimiento al derruido
sistema médico asistencial para dar jugosos negocios a la esposa del cuñado del
Notario de la Mafia, Rutilito, el que inició el Cártel Inmobiliario desde el
TSJ?
¡Y los únicos felices son ellos!...
y ahora, los que rugen en la corte de campaña del Jaguar sin que vean el jinete
que cobra al ladrón de las Afores, el favor que recibió el abuelo, para dejar
en la impunidad al fratricida.
Hasta la próxima.
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