miércoles, 25 de septiembre de 2024

Llama Monreal al desacato ©

Arcano Político


Mario Luis Altuzar Suárez
Arcano Radio

Con la creencia de que su patrón es la Ley, el zacatecano Ricardo Monreal Ávila desacata orden de la Suprema Corte de Justicia de la Nación sobre la ilegal y anticonstitucional Reforma constitucional del Poder Judicial, y escudándose en su “cátedra” universitaria de Derecho Constitucional, llama a los órganos electorales a hacer lo mismo.

En una falsa interpretación para “descalificar” el mandato jurídico, Monreal llama al INE a desacatar suspensión de juez al proceso de elección del Poder Judicial, bajo la mentira de que "surge de un órgano incompetente y de una intromisión grosera de un juez, de una jueza". Confirma su actuación al margen de la Ley.

Monreal es un animal de costumbres que, al repetirlos sistemáticamente, desde su falsa óptica cree que son hábitos que deben respetarse. Máxime que su actuación se encuentra lejos del razonamiento libre y se somete a la obediencia debida de los que identifica en su inconsciente, a los que percibe como sus superiores con los que debe congraciarse.

El primer indicio lo mostró abiertamente en 1988, cuando pidió a la colimense Socorro Díaz Palacios, presidente de la Cámara de Diputados, reunir a los diputados priistas para ir a partirles su ma… a los que calificó de revoltosos, los miembros y seguidores del Frente Democrático Nacional, que defendían el triunfo electoral de Cuauhtémoc Cárdenas.

Un año en que los órganos electorales eran manejados y manipulados por la Secretaría de Gobernación, en ese tiempo, a cargo del que se dice poblano (nació en los límites de Puebla con Veracruz porque su padre huía de Tabasco), Manuel Bartlett Díaz, con una población nacional de 82 millones 248 mil 445 mexicanos.

Correspondía al Padrón Electoral de 38 millones 74 mil 926 registrados y asistieron a las urnas, según las cifras del funcionario, 19 millones 801 mil 218 votantes, de los cuales, después de una “caída prolongada del sistema”, 9 millones 687 mil 926 sufragios, equivalente al 42.2 por ciento correspondían a Carlos Salinas de Gortari y 5 millones 929 mil 585 a Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano.

Para evitar que se confirmara la veracidad de las cifras, empero, a la inversa, se incendió el Palacio de San Lázaro en donde se encontraban los paquetes con las boletas electorales, al triunfador se le encerró en la casa de Manuel Aguilera en San Ángel con Manuel Camacho Solís, y se le amenazó mientras sus seguidores estaban en plantón en el Zócalo. ¡Se consumó el fraude! Y el zacatecano Monreal y cómplices estaban felices.

Es inolvidable el día en que metió a su hermano en la cajuela de su automóvil para meterlo a la Cámara de Diputados y tomara protesta para investirse de inmunidad legislativa y burlar la orden de aprehensión por narcotráfico, o el apoyo del chiapaneco Verde, Manuel Velasco Coello y su secretario de Gobierno, Eduardo Ramírez Aguilar, para liberar a dos de sus operadoras con el narcodinero que les había decomisado en el aeropuerto de la capital chiapaneca.

En el rosario de ilegalidades como gobernador de Zacatecas del 2006 al 2012, destacan las “fugas” o “liberaciones” por comandos armados de los líderes del Cartel de los Zetas, ese grupo formado por militares que fueron entrenados en Estados Unidos para combatir el narco y que, oficialmente, desertaron para crear un grupo paramilitar.

Un currículo que pinta de cuerpo entero al que cobra, además, como catedrático de Derecho Constitucional en la UNAM, empero, no le alcanzó su experiencia priísta, en donde fue coordinador nacional de la Defensa Jurídica del Voto, para burlar la voluntad de los electores de la Alcaldía Cuauhtémoc, ¡otro Cuauhtémoc!, para imponer a su hija.

Dueños de casas, haciendas y gasolineras, experto golpeador desde 1988, ahora llama Ricardo Monreal Ávila a los funcionarios de los órganos electorales, tomados por asalto por su patrón, el Emperador Andrés Manuel I, a que desacaten la suspensión provisional dictada el 24 de septiembre, por el juez Francisco Javier García Contreras, titular del Juzgado Segundo de Distrito con residencia en Colima.

Ordena el togado, no realizar el proceso de elección de ministros, magistrados y jueces en 2025, como establece la reforma al Poder Judicial que se aprobó en medio de irregularidades que inician con una súper mayoría legislativa anticonstitucional, secuestro de un legislador, cambio de sedes, primero Diputados y después senadores, amuralladas con placas de acero de dos y medio metros, coronadas con alambres con navajas en lugar de púas.

Se atreve el zacatecano apodado saca-zetas, a descalificar la orden del juez porque, en su dogma de que ninguna ley está por encima de la investidura presidencial, luego entonces el juez representa a “un órgano incompetente y de una intromisión grosera de un juez, de una jueza”.

Y en el éxtasis de sentirse impune en desacatar la Ley, ordena que el “INE puede continuar su trabajo, porque violó el principio de legalidad, violó la Constitución y ninguna autoridad tiene la obligación de acatar una decisión que es totalmente ilegal”. Es decir, que la única legalidad para el “catedrático” es la palabra de su amo y señor.

Así, buscan consolidar el Golpe de Estado, en recintos legislativos amurallados sin pensar que su futuro está definido y se salvará a la Patria por agentes extranjeros, al desclasificarse el expediente del asesinato en 1985 del agente de la DEA, el mexicano nacionalizado estadounidense Enrique “Kike” Camarena Salazar, que confirma la vinculación del Manuel Bartlett Díaz.

De otro, al que pago 14 años como “oreja” en las Islas de la UNAM, ya lo avisó Kamala Harris; Va por el Cartel de Sinaloa, el que elaboró la política de seguridad de “abrazos no balazos”. Si no gana la demócrata, el republicano Donald Trump también anunció que va por los narcos, aunque en extremo, piensa usar a marines.

Y, si nos dejan, hasta la próxima.

mariolaltuzar@gmail.com

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