Monja voladora ©, Cuento

Arcano Literario

Mario Luis Altuzar Suárez

Arcano Radio

…era extraterrestre! Te digo que lo vi. Esa negra figura, volaba por el cielo ¡sin alas y sin algún artefacto que lo sostuviera por el aire”, suelta en extremo agitado el imberbe de unos 16 años de edad. Las facciones del rostro endurecidos por el frio en combinación al miedo generado en sus ojos casi cubiertos con el gorro frigio que mueve instintivamente con las manos enguantadas. El interlocutor, un adulto que se divierte con las expresiones del joven, inquiere sonriente:

- “¿Seguro? Mira que viajar nueve mil seiscientos cuarenta y cuatro kilómetros de la Ciudad de México a Courmayeur ¿para confirmar las leyendas del Popocatépetl sobre los viajeros de otros mundos? ¡Habrase visto!”, expresa al adolescente que se siente comprendido en su inquietud. Y amplía su explicación:

- “Así, como me aconsejaste, salí a las 5 horas del hotel y por la Vía Circonvallazione me dirige al Norte. Después de unos doscientos metros, llegué a los remontes. Subí al Mont Blanc, allí, en Grands Mulets. Me calcé las botas aseguradas a los esquíes. Y antes de iniciar el descenso ¡Lo vi! Pasó raudo. La figura negra destacó con la luz del sol que apenas aparecía en el horizonte. ¡Me aterroricé! Me quité lo que me había calzado y bajé para venir contigo”.

El escucha, lleva la mano derecha a la barbilla y yergue el metro noventa de su corpulento cuerpo. Da unos pasos en círculo. Y se dirige a su maleta. Busca una fotografía de los fanáticos voladores en la cadena montañosa bautizada por los Celtas como Los Alpes, algunos prefieren la parte francesa y que ellos se sienten cómodos en el lado italiano, precisamente en Mont Blanc, a una altitud sobre el nivel del mar de cuatro mil 805 metros.

Aunque, la preferencia puede obedecer a la leyenda originada en 1644, en que los residentes hicieron una procesión y el obispo exorcizó a la ya llamada “Montaña Maldita”, centro del Reino de la Diosa Blanca, en realidad, la Reina de las Hadas que se molestaban con la visita de extraños tan desconocedores del respeto al entorno natural.

El mozuelo con su acompañante, se visten y desayunan con la disposición de subir a las blancas montañas y desentrañar el misterio del extraterrestre volador. El encargado de entregar los esquíes en la central, entrecierra los ojos para facilitar el ejercicio de memorizar lo que vio a las cinco horas con 30 minutos. Del mostrador extrae una libreta en donde apunta los nombres de los visitantes. Su dedo índice izquierdo se desliza por la hoja y se detiene n un nombre, para exclamar eufórico:

- “¡Es la Hermana Caroline! Ella es del Convento de Montesenario, de la Orden de los Siervos de María, a unos quinientos kilómetros al sureste. Desde que fue erigido en 1234 por siete nobles florentinos, tenemos registro de que acostumbran a venir a este lugar para desestresarse. Y tienen razón: Es mucho trabajo el que tienen. Imagínese, el gran hospicio de creado en 1603, la iglesia dell’Addolorata, de 1412 y renovada en el siglo XVIII, que conserva en su interior la capilla dell’Apparizione y el convento, con un claustro del siglo XV. Sin descontar la producción de licores, como el delicioso Gemma d'abeto”.

Incrédulo, el joven insiste en la visión que tiene una explicación: ¡Las monjas jamás se quitan el hábito! Y en el caso de la Hermana Caroline, ¡tiene una habilidad que ya la quisieran los competidores de las olimpiadas que se iniciaron en 1924 en Chamonix, Francia. ¡Qué pirueta, y saltos de largo alcance que parece flotar en el cielo!

Satisfechos con la explicación, se disponen a practicar el deporte que, algunos expertos ubican el origen del nombre en nórdico antiguo skíth, que significa ‘palo’ o ‘trozo de leña’, que a su vez proviene de la raíz indoeuropea -skeid, que significa ‘cortar’ y en le presente consiste en deslizarse por la nieve con dos tablas sujetas a la suela de las botas del esquiador mediante fijaciones mecanicorrobóticas.

Se acepta en el concepto Ski y se discrimina el Sky por su significado literal de “cielo” en donde podrían incluirse esas grandes piruetas y largos saltos que, al adolescente le llevaron a pensar en un extraterrestre.

 

Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, México, 15 de mayo del 2025.