martes, 19 de junio de 2018

Separar a padres migrantes de sus hijos es más que una tortura: AI


De la Mesa de Redacción
De CERIGUA


La política de “tolerancia cero” de Estados Unidos para separar a los padres migrantes de sus hijos no es más que “una tortura”, la cual dejará una mancha imborrable en la imagen de ese país, aseguró Amnistía Internacional (AI).

La medida es espectacularmente cruel: arranca a niños y niñas aterrorizados de los brazos de sus padres para llevarlos a centros de detención abarrotados que son, a efectos prácticos, jaulas; eso no es otra cosa que tortura, declaró Erika Guevara Rosas, directora para las América de AI.

Desde que el Fiscal General Jeff Session anunció, el 6 de abril de este año, la “política de tolerancia cero para la entrada ilegal delictiva”, las autoridades de ese país han separado a más de 2 mil menores de edad de sus padres o tutores, en la frontera con México.

No obstante, las estadísticas a las que han tenido acceso los medios de comunicación indican que posiblemente sean varios miles más las familias migrantes separadas por el gobierno de Donald Trump, incluso antes de que se empezar a aplicar esta política.

La organización recalcó que estas acciones violan de múltiples formas los derechos de las niñas y niñas, pues se les detiene, se les separa de sus padres o tutores y se les expone a un trauma innecesario que podría afectar a su desarrollo.

El gran sufrimiento mental que las autoridades han infligido deliberadamente a esas familias para coaccionarlas implica que esos actos se corresponden con las definiciones de tortura, tanto de la legislación estadounidense como del derecho internacional, aseguró Guevara.

No hay ninguna duda de que la política del gobierno del presidente Trump de separar a madres y padres de sus hijos e hijas se ha diseñado para infligir un gran sufrimiento mental a esas familias, para disuadir a otras de tratar de buscar protección en Estados Unidos, agregó la directora para las Américas de AI.

La organización indicó que recientemente entrevistó a 17 padres y madres que esperaban obtener asilo y que fueron separados forzosamente de sus hijos e hijas este año; en todos los casos, salvo en tres, habrían ingresado legalmente a Estados Unidos para solicitar asilo.

Guevara aseguró que las declaraciones de Trump “suenan falsas”, pues esta “práctica cruel e innecesaria” no se aplica solo a las familias que cruzan las fronteras de manera irregular, sino también a aquellas que buscan protección en los lugares de ingreso.

La mayoría de estas familias huyeron a ese país en busca de protección internacional ante la persecución y violencia selectiva en el Triángulo Norte de Centroamérica, donde sus propios gobiernos carecen de voluntad o de capacidad para protegerlas.

Las imágenes repugnantes de niños y niñas cruelmente separados de sus padres y encerrados en jaulas como consecuencia de la política de “tolerancia cero”, dejará una mancha imborrable en la reputación de ese país, aseguró AI.

La organización pidió al gobierno estadounidense que ponga fin inmediatamente a esta política de separación “forzosa innecesaria, devastadora e ilegitima”, y a reunificar lo antes posible a las familias a las que se haya separado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario