miércoles, 14 de febrero de 2018

El Amor es ciego


* Conozca las fases del Amor


* Sincretismo católico de las romanas lupercales


* Se sustentan en una leyenda del Obispo Valentín de Roma


Por Mario Luis ALTUZAR SUÁREZ
DE Arcano Político


El enamoramiento es ciego. Fase previa al Amor, cuyo Día data de la Antigua Roma, en fiestas lupercales, y sincretizadas por los católicos desde 468 al celebrar la leyenda del obispo San Valentín de Roma, que habría casado a soldados en secreto y que el matrimonio de soldados profesionales fuera prohibido por el emperador Claudio II.

En 1382, el escritor inglés, Geoffrey Chaucer, escribió un poema titulado Parlamento de los pájaros, en el que se menciona por primera vez al Día de San Valentín como un día de festejo para los enamorados.

Hacia 1842, Esther Ángel Howland comenzó a vender las primeras tarjetas postales masivas de san Valentín, conocidas como “valentines”, con símbolos como la forma del corazón o de Cupido. También en este día es común la tradición de regalar rosas a aquellas personas a las que se tiene un afecto especial.

Existen diversas teorías que otorgan a esta fecha el origen del Día de los Enamorados. En los países nórdicos es durante estas fechas cuando se emparejan y aparean los pájaros, de ahí que este periodo se vea como un símbolo de amor y de creación.

Al margen de la historia, existen intentos, hay intentos filosóficos para tratar de entender el Amor, considerado como el Quinto Elemento en la Enseñanza Iniciativa y que Sócrates, en Fedro de Platón, explora:

“Cuando el deseo irracional, sofocando en nuestra alma este gusto del bien, se entrega por entero al placer que promete la belleza, y cuando se lanza con todo el enjambre de deseos de la misma clase sólo a la belleza corporal, su poder se hace irresistible, y sacando su nombre de esta fuerza omnipotente, se le llama amor”.

Empero, en el Tercer Milenio caracterizado por el Síndrome Santo Tomás por el avance tecnológico y científico, los hombres de ciencia buscan causas biológicas y químicas, y Jorge Iván Castillo-Quan concluye en el portal NeuroMéxico concluye que simple y llanamente que “el amor es ciego”. Esto es lo que escribe:

…las bases neuroquímicas del amor han sido definidas con un puñado de sustancias químicas que modulan la comunicación entre neuronas (muy probablemente simplificando en exceso las bases neurobiológicas del amor).

Las dos principales de estas sustancias son la oxitocina y la vasopresina. Estas a su vez interaccionan con otra sustancia llamada dopamina.

De manera interesante la oxitocina es secretada durante el orgasmo sexual en ambos sexos, y las contracciones durante la labor de parto y la lactancia materna. La vasopresina por su parte actúa en los riñones haciendo honor a su nombre alterno, hormona antidiurética.

La vasopresina y oxitocina actúan en los centros del placer donde la dopamina es una sustancia química dominante.

La liberación de dopamina en estos centros es estimulada por drogas como la cocaína y esta liberación es la que ocasiona la sensación de “bienestar” y euforia relacionado con el consumo de esta y otras sustancias similares.

A su vez la liberación de dopamina está ligada a la reducción de otra sustancia química en el cerebro, la serotonina.

La serotonina modula emociones como angustia, agresividad y miedo, pero también el apetito (como función de ingesta de alimentos) y el deseo sexual.

El balance entre el impulso sexual y el apetito ha llevado a algunos a sugerir que una vida sexual activa y saludable podría funcionar como un importante supresor del apetito, quizá ayudando al control de peso.

Estas relaciones aun necesitan más estudio. También se ha correlacionado la depleción de serotonina que ocurre en el cerebro de personas enamoradas con pacientes que sufren del trastorno obsesivo compulsivo, sugiriendo que el amor es, desde este particular punto de vista, un tipo de obsesión.
Una etapa que confunde a muchos es la etapa de enamoramiento inicial, y en realidad está también tiene sus orígenes en la química cerebral.

La oxitocina es la hormona de la confianza, ayuda a suprimir la neofobia, el temor a lo nuevo.

Por ejemplo, cuando se conoce a esa persona nueva la sensación inicial de confianza o familiaridad se ha sugerido es debida a la secreción de oxitocina. Después de esta etapa viene la etapa de la ceguera total, por la que el amor se ha considerado ciego.

Esto se puede explicar en bases a patrones de actividad cerebral en áreas corticales del cerebro responsables del juicio.

En las etapas iniciales del amor se inactivan las áreas cerebrales responsables del juicio ante la persona amada. Sin embargo, esta pérdida del juicio parece ser selectiva, solo para esta persona y no para otras personas o actividades.

El porqué de este comportamiento y patrón de actividad cerebral se ha relacionado con la idea de unidad que subyace al concepto del amor.

El amor presume la unión de dos personas y la formación de una unidad en la que ambas personas deben ser indistinguibles, dos se vuelven uno. Para que esto ocurra el cerebro debe suprimir la capacidad de distinguir entre el otro y uno mismo, y con ello se suprime la capacidad de realizar juicios objetivos en cuanto al otro.

El amor es ciego, pero no por siempre. Afortunadamente esta solo es una etapa del amor. En la teoría triangular del amor del psicólogo Robert Sternberg se pasa de un las fases iniciales de intimidad y pasión a la fase del amor caracterizada por compromiso.

Otros conceptos


El psiquiatra belga José Miguel Gaona Cartolano, explica que el amor, aunque no suene "especialmente romántico", no deja de ser una conjunción de reacciones químicas, ligadas a otros estímulos como alimentación, actividad sexual "o aficiones similares". Ese tipo de reacciones tienen una función determinada, como es crear vínculos que permitan cuidar a la descendencia, "no para que nos sintamos bien porque los humanos seamos el centro del universo", puntualizó.

Las fases del amor


Nos enamoramos paso a paso, en tres fases distintas:

Primera fase: reconocemos en la pareja actitudes, virtudes y otros elementos clave que responden a la frase "me parece atractivo", explicó Gaona.

Segunda fase: "es el momento de las fantasías desbocadas, en el que atribuimos cualidades extraordinarias a nuestra pareja debido al bienestar endorfínico que nos produce su cercanía".

Tercera y cuarta fase: En las dos últimas etapas hay más trato y actividades en común, y se crea un vínculo emocional y sexual, con una segregación importante de la feniletilamina, que también aparece en el chocolate, de ahí que no sea casual que se considere a este dulce como a un sustitutivo del sexo.

El amor es una droga


Quienes comparan el amor con una droga no carecen de razón, es precisamente cuando deja de segregarse esta sustancia cuando surgen los problemas, y es que las endorfinas, junto con las apomorfinas, son las hormonas que inducen a la adicción. Gaona considera que las relaciones no tienen por qué terminar una vez que acabe el amor romántico, a pesar de que esta sensación sea "sumamente adictiva".

Y es aquí donde los poetas románticos tienen cierta culpa de los problemas de pareja de hoy en día, "hasta el XIX nadie se casaba por amor, sino por intereses, mientras que el amor se reservaba para los amantes".

De cualquier forma, ¡feliz día del amor y la amistad! Recuerde que no está de más una rosa, un poema y una cálida mirada con la ternura del abrazo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario