* Las movilizaciones continuaban en muchos aeropuertos, como el de Dulles en Washington y el de Los Ángeles, donde centenares de personas se dieron cita coreando consignas como "El amor, no el odio, es lo que hace grande a Estados Unidos" y portando pancartas como "No al veto. No al muro".
De la Mesa de Redacción
De nuestra afiliada La Voz de América
"Condenamos la orden ejecutiva inconstitucional,
antiestadounidense e ilegal del presidente Trump", afirmaron los
procuradores, que dicen representar "más de 130 millones de
estadounidenses y residentes extranjeros" en sus estados.
Los fiscales, de estados como California, Nueva York y
Pensilvania, remarcaron su "compromiso para garantizar que tan poca gente
como sea posible sufra la situación caótica que (la orden de Trump) ha
creado"
"Como los máximos responsables legales de más de 130
millones de estadounidenses y residentes extranjeros en nuestros estados,
condenamos la orden ejecutiva inconstitucional, antiestadounidense e ilegal del
presidente Trump", señalaron en un mensaje conjunto.
Los fiscales prometieron trabajar juntos para asegurar que
el Gobierno federal respete la Constitución, la historia del país como una
nación de inmigrantes y para evitar que se persiga a gente por su origen o fe.
Además, había protestas hoy en muchos otros aeropuertos de todo el país, incluidos los de San Francisco Miami, Filadelfia, Detroit, Atlanta o Minneapolis-St. Paul. |
Grandes ciudades se levantan
Nueva York, Boston, Washington, Los Ángeles y otras grandes
ciudades de EE.UU., volvieron a ser escenario de importantes protestas contra
la polémica orden sobre inmigración del presidente Donald Trump.
En la mayoría de esos casos, las manifestaciones estuvieron
respaldadas por las autoridades locales, que se oponen frontalmente al veto
temporal a la entrada de refugiados y de ciudadanos de varios países de mayoría
musulmana decretado por la Casa Blanca.
Las protestas se habían concentrado en los aeropuertos, pero
este domingo muchos estadounidenses se lanzaron a las calles para exigir la
retirada de las medidas.
En Nueva York, más de 10.000 personas, según datos de la
alcaldía, se dieron cita en Battery Park, el gran símbolo de la inmigración en
el país.
El alcalde, Bill de Blasio, participó en el acto y criticó
muy duramente la nueva política de inmigración, alertando de los peligros que
acarrea y de la injusticia que supone.
En Washington, una gran multitud se congregó ante la Casa
Blanca para protestar contra las medidas del presidente y exigir que se permita
la entrada en el país a refugiados e inmigrantes, una concentración que luego
se transformó en una marcha rumbo al Capitolio.
En Washington, las personas se sientan en un árbol encima de
los manifestantes que portan letreros y cantan en el parque Lafayette cerca de
la Casa Blanca durante una manifestación.
En Boston una enorme multitud, con miles de manifestantes,
abarrotó una conocida plaza en respuesta a una convocatoria liderada por el
Consejo para las Relaciones Islámico-Estadounidenses.
"¿Puedes oírnos Washington? En Boston nos levantamos
con fuerza para apoyar y proteger a TODA nuestra gente", dijo a través de
Twitter el alcalde de la ciudad, Marty Walsh.
No hay comentarios:
Publicar un comentario