* El objetivo del encuentro es facilitar la participación de Corea del Norte en los Juegos Olímpicos de Invierno y rebajar la tensión regional *
De la Mesa de Redacción
De la Deutsche Welle (La Voz de Alemania)
Pasaron más de 24 meses entre un encuentro y otro, pero
finalmente este martes (09.01.2018) las delegaciones de Corea del Norte y Corea
del Sur se dieron cita en la aldea de Panmunjom, en la militarizada frontera
entre ambos países, en un intento por apaciguar las tensiones regionales y
donde, oficialmente, lo que se busca es facilitar la participación norcoreana
en los Juegos Olímpicos de Invierno, que se realizarán en PyeongChang.
Poco antes de que comenzara la reunión, Ri Son-gwon, jefe
del norcoreano Comité para la Reunificación Pacífica de la Patria, dijo a la
prensa que los diálogos "irán bien”, mostrando un optimismo inusual. La
cita inició puntualmente a las 10 de la mañana surcoreana (1.00 GMT) con los
discursos inaugurales, tras lo cual hubo una primera sesión de una hora de
duración. Tras un receso de media hora, se dio paso a una segunda ronda.
Ri, al frente de los cinco delegados norcoreanos, señaló que
las relaciones intercoreanas están "más heladas incluso que el tiempo de
estos días", en referencia al invierno excepcionalmente gélido que está
viviendo la península coreana. "Sin embargo, pese al frío, el deseo del
pueblo de mejorar las relaciones permanece intacto", añadió. Pese a la
intención de Corea del Norte, Seúl se negó a que el encuentro fuera
retransmitido íntegramente.
Esperanza en el deporte
El Ministerio de Unificación de Corea del Sur señaló que lo
mejor es tener una reunión privada y posteriormente hablar con los medios. El
presidente surcoreano, Moon Jae-in, sigue por video las conversaciones y
dispone de una línea de fax para dar instrucciones a su delegación. No está
confirmado, pero es muy probable que el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un,
utilice un sistema similar.
El ministro de Unificación surcoreano, Cho Myoung, dijo
antes de comenzar la cita que tienen la esperanza de que los Juegos Olímpicos
de invierno que comienzan el mes próximo sean un "evento de paz y un
trampolín para mejorar las relaciones" con Corea del Norte. El encuentro
de representantes se produce después de que Kim agradeciera en Año Nuevo la
predisposición dialogante mostrada por su par surcoreano desde su llegada al
poder en mayo y expresara su deseo de mejorar lazos con el Sur.
Como primer avance del encuentro, Corea del Norte enviará
una delegación e deportistas a los Juegos de PyeongChang y Corea del Sur
propuso realizar un encuentro de familias separadas desde la guerra.
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