De la Mesa de Redacción Rafael Castilleja
De Arcano Político
Felipe Solís Acero, subsecretario de Enlace Legislativo de la Segob. Foto: Archivo. |
Estima el gobierno de Enrique Peña Nieto que a partir del 21
de enero de 2017 el presidente de Estados Unidos, el magnate republicano de
ascendencia alemana, Donald Trump, podría deportar menos del millón del
mexicanos, casi 70 por ciento menos de lo prometido en su campaña electoral.
El subsecretario de Enlace Legislativo, de la Secretaría de
Gobernación, el priista tamaulipeco Felipe Solís Acero, afirmó que las
autoridades estiman que el próximo gobierno de Estados Unidos, que presida
Donald Trump, podría deportar a México una cifra de migrantes indocumentados
“que no llega ni al millón”.
El presidente electo de Estados Unidos habló de que
deportaría entre dos y tres millones de indocumentados, recordó el funcionario
en declaraciones a la prensa, al término de una reunión del comisionado
Nacional de Seguridad, Renato Sales Heredia, con diputados de la Comisión de
Seguridad Pública.
Sin embargo, agregó, “los cálculos iniciales del gobierno
mexicano establecen que el monto no llegaría ni al millón”.
Solís Acero, quien asistió como invitado a este encuentro,
señaló que habría que esperar al próximo 20 de enero, cuando Trump asuma la
presidencia de Estados Unidos, para “verlo actuar”.
Cuestionado sobre si es prudente que los poderes Legislativo
y Ejecutivo del país se reúnan para enfrentar las amenazas de Trump en torno a
la deportación de inmigrantes, Solís Acero respondió que “por parte del
gobierno hay disposición absoluta para platicar, por supuesto, con el Congreso”
de la Unión.
El funcionario aclaró que “el gobierno (de México) está
trabajando sobre el particular y ustedes han visto un activismo de parte de la
cancillería. Desde el día de la elección” de Trump, hay “acciones preventivas
en particular”.
Comentó también que se trabaja “en un programa del Instituto
Nacional de Migración (INM) para hacer frente a lo que podría venir como
consecuencia de las medidas” anunciadas por Trump, “si es que éstas se
concretan”.
Solís Acero añadió que, sin ser un asunto que “me
corresponda a mi definir”, hay que ver el tema “con cautela”.
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