Por Mario Luis ALTUZAR SUÁREZ
De Arcano Político
De la Verdad Histórica del Señor de Real del Monte, Jesús
Murillo Karam, a las verdades a medias de la hermana del Vicepresidente de
Noticias de Televisa, Leopoldo Gómez, Arely Gómez González, se oculta
sospechosamente la investigación sobre la ejecución o desaparición de 43
normalistas de Ayotzinapa en Iguala Guerrero, en 2014.
La burla del hidalguense sobre la conversión en hornos
hitlerianos los basureros de Iguala y Cocula, la enterró la Comisión
Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) de la OEA en su visita a México del
28 de septiembre al 2 de octubre de 2015.
Ahora le tocó a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos
(CNDH), enfrentar la verdad mediática de la senadora priista capitalina con
licencia, y rechaza respuestas a medias, ya que de ello dependen el esclarecimiento
de los hechos y la verdad sobre tan lamentables acontecimientos.
El organismo defensor de los derechos humanos mexicano nada
más hizo 26 propuestas y observaciones a las supuestas investigaciones de la
Procuraduría General de la República. Con la fuerza publicitaria se dijo que ya
se le había dado un primer paquete de respuestas el 30 de agosto y esta semana
se le enviará el segundo.
Los señalamientos del “nivel de avance y cumplimiento de las
recomendaciones realizadas sobre la Investigación del Caso Iguala”, para José Trinidad
Larrieta Carrasco, titular de la Oficina Especial para el Caso Iguala de la
CNDH, fue una simple una tarjeta informativa, y no fue el 30 sino el 27 de
agosto.
Al hacer un análisis de los posicionamientos de la PGR en
torno de las 26 propuestas que se le formularon, Larrieta Carrasco indicó que,
lamentablemente, ninguna de ellas fue atendida en su integridad por esa
autoridad.
La percepción generalizada es que algo huele muy mal en el
Caso Iguala, y no precisamente los cadáveres de los desaparecidos, sino la
verdad sospechosa.
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