De la Mesa de Redacción Rafael Castilleja
De Arcano Político
Celebramos este martes 10 de noviembre el Día Mundial de la
Ciencia para la Paz y el Desarrollo con el tema: “La ciencia al servicio de un
futuro sostenible”.
Fue proclamado en la resolución 31C/20 de la Conferencia
General de la UNESCO de 2001, para recordar el compromiso asumido en la
Conferencia Mundial sobre la Ciencia Disponible en inglés, que se celebró en
Budapest en 1999, bajo el auspicio de la Organización de las Naciones Unidas
para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) y el Consejo Internacional
de Uniones Científicas (CIUC).
La ciencia será esencial para alcanzar muchos de
los objetivos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y, por lo tanto,
para asegurar un futuro sostenible.
El Informe sobre la Ciencia de la UNESCO es
una de las herramientas que los países pueden utilizar para monitorear el
progreso hacia los objetivos de la Agenda 2030.
Cada cinco años, analiza las tendencias
emergentes en la ciencia, la tecnología, la política de innovación y la
gobernanza. La última edición se presentará en el Día Mundial de la Ciencia
para la Paz y el Desarrollo el 10 de noviembre de 2015. El mensaje clave del
informe se puede resumir en cuatro palabras: más investigación - mejor
desarrollo.
Mensaje de la Sra. Irina Bokova, Directora General de la UNESCO, con motivo del Día Mundial de la Ciencia para la Paz y el Desarrollo
La ciencia al servicio de un futuro sostenible
10 de noviembre de 2015
Este Día Mundial de la Ciencia para la Paz y el Desarrollo
se observa dos meses después del acuerdo en torno a la Agenda 2030 para el
Desarrollo Sostenible.
Esta nueva agenda plasma una nueva visión de la humanidad,
el planeta y la paz para los próximos 15 años y la ciencia ocupa en ella un
lugar central, como fuerza de transformación positiva y multiplicadora del
desarrollo.
Todos los gobiernos tienen conciencia hoy en día del poder
de la ciencia para proporcionar respuestas fundamentales que posibiliten una
mejor ordenación de los recursos hídricos, la conservación y la utilización
sostenible del océano, la protección de los ecosistemas y la biodiversidad,
hacer frente al cambio climático y las catástrofes, promover la innovación, eliminar
la pobreza y reducir las desigualdades. Para aprovechar al máximo este poder,
debemos entender mejor el panorama científico mundial y contar con mejores
herramientas para el seguimiento de los avances realizados.
En ello estriba la importancia del Informe mundial sobre la
ciencia que la UNESCO publica cada cinco años, con el fin de determinar las
tendencias en materia de ciencia, tecnología e innovación en todas las
regiones.
El lanzamiento de esta nueva edición tiene lugar en el Día
Mundial de la Ciencia para la Paz y el Desarrollo para destacar la importancia
cada vez mayor que los países de todos los niveles de desarrollo conceden a la
ciencia, la tecnología y la innovación. La creciente preocupación por la
recurrencia de sequías, inundaciones, huracanes y otros fenómenos naturales ha
llevado a los gobiernos a aprobar estrategias a escala nacional y regional con
el fin de proteger la agricultura, reducir los riesgos de desastre y
diversificar las fuentes de energía nacionales. El aumento de las inversiones
en la ciencia pone de manifiesto un mayor reconocimiento de la necesidad de
crear a la vez sociedades y economías que sean ecológicas, conjugando cambios
en la política y la legislación y en los valores y comportamientos.
Estos temas se abordarán en la Conferencia de las Naciones
Unidas sobre el Cambio Climático (COP 21) que se celebrará próximamente en
París, congregando a dirigentes de todo el mundo para aprobar un nuevo acuerdo
de cooperación internacional con objeto de mitigar las consecuencias del cambio
climático. La ciencia, la tecnología y la innovación son esenciales a este respecto
y no debemos escatimar esfuerzos para ayudar a las sociedades de todo el mundo,
en todos los continentes, a crear y compartir conocimientos.
La Agenda 2030 junto con la Agenda de Acción de Addis Abeba
insta a emprender nuevos esfuerzos para implantar políticas y sistemas
nacionales de ciencia y tecnología e innovación sólidos y facilitar así la
transferencia de tecnología y de soluciones, causa que la UNESCO está
absolutamente determinada a propiciar.
Este es el mensaje del Informe mundial sobre la ciencia de
la UNESCO y de este. Día Mundial de la Ciencia para la Paz y el Desarrollo.
Invito a cada uno de ustedes a difundirlo con nosotros en el mundo entero para
preparar un futuro mejor para todos.
Irina Bokova
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